El 24 de enero se cumplieron 10 años del asesinato de Mauro Mateus dos Santos, más conocido como Sabotage, rapero fundamental que en Brasil es habitualmente comparado con 2pac. De él conversamos con Toni C, escritor, documentalista y activista del movimiento hip hop brasileño que estuvo ocasionalmente por Buenos Aires. La charla, breve pero rica, incluyó también la visión de Toni sobre la actualidad del movimiento en el país carioca y un primer acercamiento al concepto con el que tituló su último libro: "El hip hop está muerto".
Llego al bar corriendo desde Retiro. Vengo de presenciar una de las audiencias del juicio por la muerte del militante Mariano Ferreyra, asesinado por una patota de la burocracia sindical. En el microcentro la vida sigue como si nada, cuesta entenderlo luego de escuchar los relatos de aquel día. En el microcentro me espera Toni C, integrante de Nação Hip Hop Brasil, una organización que ya tiene 7 años. Él es dj, escritor y director del documenal É tudo nosso!: O Hip Hop Fazendo História considerada una de las mejores películas sobre hip hop de Brasil. Autor de varios libros sobre la cultura de los 4 elementos en Brasil, su ultimo trabajo se tituló "O hip hop está morto". Su próximo libró será, nada más ni nada menos, que la biografía oficial de Sabotage, rapero y actor brasileño que fue asesinado hace 10 años.
- ¿Por qué el titulo tan provocador para tu libro?
- En necesario leer el libro (risas), Hip Hop está muerto es una afirmación de alguien que trabaja para exterminar el hip hop. Y es preciso que tengamos conciencia que hay gente que se esfuerza para ver el fin de nuestra cultura. Pero el hip hop está vivo, no sólo en Brasil, en Argentina, en otras partes del mundo también, con su conciencia porque tiene capacidad de producir, arte, cultura, cambiar vidas, pero también discutir acerca de su propia trayectoria y sobre los que quieren ver muerto nuestro movimiento.
- Cuál es la importancia de Sabotage en la historia del hip hop brasileño?
- Es difícil dimensionarlo. Creo que va a ser necesario mucho tiempo para saberlo. Yo estoy descubriendo un poco de su importancia pero me parece que es un personaje que es un personaje como Zumbi Dos Palmares en la historia de Brasil que fue un rebeldes que creó un quilombo para terminar con la esclavitud y los esclavos tuvieran donde vivir. Sabotage es un poco eso, dentro de 300 años va a ser conocido como una figura que superó todo: las dificultades, el preconcepto racial, y presentó su arte de una manera muy auténtica y encantadora.
- Cuál es la vigencia o actualidad de la música y el mensaje de Sabotage hoy?
- Esa es una de las cosas que llaman la atención y que lo hacen muy singular. Él fue asesinado hace muchos años pero si escuchas su música ahora te va a aparecer muy actual. Era una cosa muy futurista, y eso es difícil de comprender. Él habla de dos, tres, cuatro temas simultáneamente en una única canción, entonces a veces tenemos dificultad para entender de todo lo que habla.
- Desde acá pareciera que hubo un cambio bastante importante dentro del hip hop brasileño en los últimos años...
- Un punto de inflexión fue el concierto que dió Racionais MC’s en Praça da Sé en 2007, donde la policía rodeó el lugar y tiró gases lacrimógenos para dispersar a la multitud y hubo muchos heridos. En los días siguientes lo que se hablaba en los medios era que Racionais era un grupo de vándalos que generaban toda la violencia y que su público era marginal, bandidos. Y desde entonces hubo una persecusión política y policial hacia el movimiento hiphop. No había más shows, que eran clausurados por la policía con todas las estrategias posibles para que el show no se llevara a cabo. Y pienso que el público de hip hop se mudó para otras cosas, otras músicas, como el funk carioca, por ejemplo, donde el público es el mismo pero donde hay menos conciencia política y social. Esa represión hacia el hip hop fue muy fuerte, muy grande y hoy está ocurriendo lo mismo en el funk. Mi libro “El hip hop está muerto” trata fundamentalmente de entender el momento actual y de reconstruirnos.Así que Criolo, Emicida son gente que son parte de ese cambio.
- Cuenta un poco de la relación en hay en Brasil entre movimiento hip hop y movimientos sociales...
- Hay una relación muy fuerte pero el movimiento hip hop es parte del movimiento social. Es un movimiento social y es uno fuerte, auténtico y con banderas muy explícitas, muy puntuales. El hip hop tiene una parte social, si es solo una cultura, una música no es hip hop, es otra cosa.
- ¿Cuáles son esas banderas?
- Libertad, poder para el pueblo negro y para el pueblo pobre, poder para la mayoría. Cuando nosotros conseguimos que Lula llegue al poder el movimiento hip hop fue parte de esa conquista, el rap tambien luchó que un obrero, una persona pobre, trabajadora, que no tiene estudios universitarios llegara a la presidencia de Brasil para ayudar a cambiar la realidad del país y de América Latina. El hip hop fue parte de eso.
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